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Crónicas
del Bicentenario
LOS
JINETES DE CHINCHA, PISCO, ICA, PALPA Y NASCA
EN LAS
BATALLAS DE JUNÍN Y AYACUCHO
El 19 de octubre del año 2001, en el Salón
Consistorial de la Municipalidad Provincial de Ica; el Crnel. (r)
Ricardo Vázquez Salinas, historiador e investigador de asuntos nacionales y
Presidente del Instituto de Estudios Históricos “Jorge Basadre Grohman” de la Gran Logia del Perú;
realizó una brillante conferencia titulada “Ica: Primera en proclamar la Independencia del Perú”.
Los valiosos datos históricos presentados en dicha
conferencia magistral, reafirmaron que el 21 de octubre de 1820, después del
desembarco en Paracas - Pisco de la
Expedición Libertadora del Perú, al mando del general don José de San Martín;
y, luego de las primeras victorias patriotas al mando del coronel mayor Juan
Antonio Álvarez de Arenales, en Palpa, Changuillo, Nasca y Acarí; se realizó la
Solemne Proclamación y Jura de la Independencia en Cabildo Abierto y en la
Plaza de Armas de Ica.
Asimismo, el Crnl. Ricardo Vásquez Salinas,
rescató del olvido al Escuadrón de Caballería “Auxiliares Patriotas de Ica”, creado
por el Libertador San Martín; la primera unidad del Ejército del Perú,
integrado por valientes jinetes de las hermanas provincias de Chincha, Pisco,
Ica, Palpa y Nasca.
Ahora nos toca a las nuevas generaciones de
chinchanos, pisqueños, iqueños, palpeños y nasqueños, REVALORAR Y RENDIR HONORES a nuestros héroes regionales, en éste año
2020, el año del Bicentenario de la Independencia de la Región Ica.
El problema del coronavirus ha paralizado una
serie de actividades oficiales y proyectos del Bicentenario, que ya habían
iniciado algunas entidades públicas y privadas; pero eso no significa que desde
nuestros hogares, en plena cuarentena, no se realice la difusión y
concientización a nuestros hijos, miles de escolares que están deseosos de
conocer la historia regional del Bicentenario y fortalecer su IDENTIDAD
NACIONAL.
Invocamos a las cinco hermanas provincias de la
Región Ica, a compartir la siguiente información, algunos párrafos de la
conferencia señalada, como un deber patriótico, que levante la moral a nuestros
pueblos hermanos, en tiempos del coronavirus…
ICA, PRIMERA BASE MILITAR DE LA EXPEDICIÓN
LIBERTADORA DEL CORONEL JUAN ANTONIO ÁLVAREZ DE ARENALES
“… Sin embargo, la ceremonia de
la proclamación y jura, se llevó a cabo, recién
el día 21 de octubre de 1820. Ella se ejecutó el mismo día de la partida de la división
militar del coronel Alvarez de Arenales,
hacia la sierra. Es seguro, que ante la próxima, larga y recia campaña hacia la sierra central del Perú, la
ceremonia previa de la independencia, sirvió de gran incentivo a todas las
tropas patriotas. Coincidentemente, en aquel
brillante día 21 de octubre, San
Martín hacía flamear la primera bandera
nacional, en Pisco. Cabe recordar que el diseño del proyecto de la bandera fue
realizado por el joven tripulante inglés de 26 años, Charles Chaworthy Wood
Taylos, natural de Liverpool y de quien, valgan verdades, nos hemos olvidado.
Pero también, la emotiva
ceremonia tuvo otros fines, sobre todo
bélicos, pues el propio pueblo iqueño se convirtió en una gran base militar de apoyo integral al avance del
ejército patriota. En este sentido ya se había creado en la misma ciudad de
Ica, el Escuadrón de Caballería "Auxiliares Patriotas de Ica" que,
incorporado a la división de Álvarez de
Arenales, partió también hacia los Andes Centrales del
Perú.
Este escuadrón de caballería
tiene el mérito de ser la primera unidad
militar peruana, que se organizó en nuestro
país. Es de importancia histórica
para el honor del pueblo de Ica, ya que tal unidad, es más antigua que la
siempre reconocida “Legión Peruana de la Guardia ”, la que se formó en la ciudad de Lima
recién en 1821.
La organización humana del
escuadrón viene a ser también el primer
eslabón nacionalista de la integración peruana. En su personal conformado en más del 95% por iqueños, había
entre criollos y mestizos, cuatro
oficiales, seis sargentos, doce cabos y doce
carabineros. La tropa quedó constituida por 96 jinetes negros voluntarios, todos los cuales y en conjunto
fueron rápidamente armados con 250
mosquetes y uniformados con la colaboración de las familias iqueñas, las
que facilitaron además 350 caballos. La comandancia del escuadrón recayó en el
sargento mayor rioplatense Félix Aldao.
El bautizo de fuego de este
decidido y valiente contingente iqueño por la independencia del Perú, se
produjo el día 26 de noviembre de l820,
en la sierra central y cerca de
Huancayo, donde vencieron a una tropa realista.
DEL ESCUADRÓN “AUXILIARES
PATRIOTAS DE ICA” AL
“ESCUADRÓN DE GRANADEROS A
CABALLO DEL PERÚ”
San Martín, por Orden General del
20 de febrero de l821, creó la Primera División
Peruana, recibiendo el mando el coronel Agustín Gamarra, posteriormente Presidente de la
República. Dentro
de esta gran unidad quedó incorporado el mencionado escuadrón
iqueño, reconociéndose su fuerza y
valor. Si bien permaneció con sus mismos
jefes y organización humana, le fue cambiado el nombre por “Escuadrón de Granaderos a Caballo del Perú”.
El título de este nombre, también
es sumamente honorable. En aquella
época ser llamado “granadero” significaba, aparte de ser un jinete de mucha habilidad y buen porte
militar, el tener que marchar delante
de toda las tropas en busca del enemigo.
DEL ESCUADRÓN “AUXILIARES PATRIOTAS DE ICA” AL
REGIMIENTO “GRANADEROS A CABALLO DE LOS ANDES” Y LAS VICTORIAS DE JUNÍN Y
AYACUCHO
Este honor dado a los primeros
soldados iqueños, tomó mayor resonancia
cuando en junio de l822 y por orden del propio general San
Martín, el escuadrón pasó a ser parte del célebre Regimiento del
Río de la Plata , el llamado
“Granaderos a Caballo de los Andes”, luchando
en l824 con arrojo, fe y corazón, en las bravas batallas de Junín y Ayacucho, las que consolidaron la
independencia del Perú y de toda
América española.
Finalmente, la noble y
heroica actitud de los jinetes de
este intrépido escuadrón, y demostrado con creces en la
cruenta jornada de la emancipación, era consecuencia de la larga y constante
participación del hombre iqueño por los
ideales de libertad, igualdad y
fraternidad.
Dicha participación histórica en
la gesta libertaria está testimoniado en un conjunto de hechos sucesivos que
así lo atestiguan y que creo no debemos olvidar, pues en ellos los iqueños
entregaron su sangre, vida y todo lo que
tenían.
Por ello, en esta excelente
oportunidad cívico-patriótica, y haciendo
Historia Patria, me permito traer a colación a más de l80 años,
acciones de gran
importancia estratégica y
táctica, que debemos siempre tener
muy presente, tales como:
La acción psicológica pisqueña
para que desertara en l8l6, el destacamento realista “Dragones de la Unión ”.
Las amplias y exactas
informaciones levantadas por iqueños anónimos para que en l818 fueran enviadas
por Riva Agüero a “INACO”, seudónimo que utilizó San Martín para planear y
dirigir el arribo de la expedición libertadora a nuestra la peruana.
La participación del pueblo de
Pisco en el ataque de
Lord Cochrane del 07 de noviembre de l8l9, contra la poderosa guarnición
militar realista que protegía el puerto.
La actividad masónica, que
permitió las condiciones ideales para el desembarco patriota, desde antes del 8
de septiembre de l820, así como la
deserción del Regimiento de Caballería de Milicias Realistas de Chincha, cuyos 700 jinetes, en su mayoría
negros, pasaron a reforzar los batallones No 7 y 8 del Río de la Plata , y el No 4 de Chile, la incorporación en el
ejército libertador, de gran cantidad de criollos iqueños, y la presentación
del cacique de Chincha con más de 700 indígenas, que pidieron ser dados de
alta en la infantería
patriota.
El gran apoyo humano y logístico dado por todos los pueblos de Ica cuando comenzó
el desembarco de las primeras tropas patriotas, teniendo en cuenta que se tuvo
que alimentar y proteger por cerca de
treinta días a 5,000 soldados, 2,000
marinos, y más de l,500 caballos”.
Para reforzar tan valiosos datos,
encontramos lo siguiente en el portal institucional del Ejército del Perú:
UNIDADES
MILITARES
El
origen de nuestras primeras unidades militares se remonta a los albores de la
guerra de independencia y a la llegada de la Expedición Libertadora, la cual
despertó de inmediato el entusiasmo de los peruanos, quienes, desde 1818,
mantenían correspondencia secreta con San Martín coordinando su llegada al
Perú. Este apoyo se evidenció en la masiva presencia de voluntarios en el
campamento patriota de Pisco, solicitando su alta en las filas de la libertad.
Es así, que San Martín se decidió a organizar con ellos las primeras unidades peruanas. Como primera medida, el 21 de octubre de 1820, firmó el decreto de creación de la Bandera Nacional del Perú, para que los peruanos, que comenzaban a organizarse militarmente, tuvieran un símbolo patrio que defender y bajo el cual combatir. Estas unidades fueron: los escuadrones “Auxiliares de Ica” y “Húsares de la Escolta”; los batallones “Cazadores del Ejército” y “Leales del Perú”; y la “Legión Peruana de la Guardia”. Nació así el Ejército del Perú. He aquí una breve reseña histórica de ellas.
Es así, que San Martín se decidió a organizar con ellos las primeras unidades peruanas. Como primera medida, el 21 de octubre de 1820, firmó el decreto de creación de la Bandera Nacional del Perú, para que los peruanos, que comenzaban a organizarse militarmente, tuvieran un símbolo patrio que defender y bajo el cual combatir. Estas unidades fueron: los escuadrones “Auxiliares de Ica” y “Húsares de la Escolta”; los batallones “Cazadores del Ejército” y “Leales del Perú”; y la “Legión Peruana de la Guardia”. Nació así el Ejército del Perú. He aquí una breve reseña histórica de ellas.
Escuadrón de Auxiliares de Ica
El
origen de la primera unidad peruana está íntimamente vinculada a la historia de
nuestra bandera nacional, porque inmediatamente después de su creación nació el
Escuadrón de Auxiliares de Ica. Por eso podemos afirmar que fue este cuerpo el
primero en enarbolar los colores patrios. Se organizó con voluntarios de esa
provincia, bajo el comando del sargento mayor Félix Aldao.
Para
ese fin contó con 250 mosquetes y 350 caballos. Refieren las crónicas que los
reclutas eran voluntarios negros cuyo número ascendía a 96, además de 6
sargentos, 12 cabos y 12 carabineros, distribuidos en tres compañías. Su
intención era que este escuadrón fuera la base para organizar un regimiento de
4 escuadrones.
La orden general del 20 de febrero de 1821 creó la primera División Peruana y oficializó la creación de ésta y otras unidades. Entonces los “Auxiliares de Ica pasaron a denominarse "Escuadrón Granaderos a Caballo del Perú", continuando bajo el comando del sargento mayor Aldao. Estuvo operativo hasta junio de 1822, cuando fue integrado al escuadrón de Húsares de la Legión Peruana.
Batallón Cazadores del Ejército
Fue la segunda unidad en crearse. Se organizó en Huaura, en noviembre de 1820, sobre la base de oficiales patriotas que habían estado prisioneros en las casamatas del Real Felipe del Callao, que luego de las conferencias de Miraflores fueron canjeados por prisioneros realistas. Su primer jefe fue el teniente coronel José María Aguirre. Esta unidad subsistió hasta 1823, ya que durante la segunda expedición a Puertos Intermedios fue prácticamente destruida y sus pocos sobrevivientes se refundieron en otras unidades del Ejército Unido Libertador.
Batallón
de Leales del Perú
Su origen se remonta a diciembre de 1820, cuando el sargento mayor Juan Mangas organizó el Batallón Veteranos de Jauja con voluntarios de esa provincia. Fue la tercera unidad peruana y en febrero de 1821 se instruía en Huancayo. Había incrementado su efectivo con veteranos del “Regimiento del Cusco”, unidad que en enero de 1821 se separaron de filas realistas y se unieron a la causa patriota.
San Martín, oficializó la creación de este y otros cuerpos peruanos, que habían aumentado su efectivo, mejorado su instrucción y organización. En la Orden General del 20 de febrero de 1821, se aprobó su formación de acuerdo a ordenanza y se les dio nuevo nombre. Al "Auxiliares de Ica" lo denominó "Escuadrón Granaderos a Caballo del Perú" y al "Veteranos de Jauja", lo llamó "Batallón Leales del Perú". Asimismo, con las unidades peruanas se creó también la primera División Peruana, al mando del coronel Agustín Gamarra.
Los “Leales del Perú”, en el transcurrir de su historial ha tenido diversas denominaciones. Así, poco después de la proclamación de nuestra independencia se les denominó Batallón de Infantería Nº 1 “Cazadores del Perú”; y desde enero de 1822 se nombró Batallón de Infantería de Línea Nº 1 del Perú. En 1823 se convirtió en Regimiento de dos batallones y su segundo batallón se formó con reclutas de Huaylas. A fines de ese año Simón Bolívar dispuso que se reorganizara como unidad suelta y tomó el nombre de Batallón de Infantería Nº 1. Bajo las órdenes del coronel José de Paula Otero participó en las batallas de Junín y Ayacucho.
En 1825, luego que se aprobara el Primer Reglamento Orgánico de la Infantería y Caballería del Perú, esta unidad y el Batallón Legión Peruana de la Guardia se convirtieron en el Regimiento “Ayacucho”, en mérito a su gloriosa actuación en la batalla que selló la independencia de América. En 1827 el regimiento se desdobló y el Batallón Nº 1 por ser el más antiguo tomó el nombre de “Glorioso Ayacucho” mientras que el “Legión Peruana” mantuvo su nombre.
Escuadrón de Húsares de la Escolta
Fue
creado en enero de 1821 bajo las órdenes del capitán Pedro Raulet y con un
efectivo inicial de 64 hombres, que conforme avanzó la instrucción se
incrementó. Su misión era servir de escolta al general San Martín. Pero los
avatares de la campaña lo convirtieron en unidad de combate. En agosto de ese
año sirvió de base para la formación de los dos escuadrones del Legión Peruana
de la Guardia.
La Legión Peruana de la Guardia
Fue creada el 18 de agosto de 1821, bajo el comando del mariscal de campo José Bernardo Tagle, Marqués de Torre Tagle. Según los reglamentos de la época, legión era un cuerpo que debía componerse de unidades de las tres armas: infantería, caballe¬ría y artillería ligera. Siguiendo estas normas, la "Legión Peruana de la Guardia" tuvo un batallón de infantería al mando del coronel Guillermo Miller; dos escuadrones de caballería, llamados Húsares, a órdenes del coronel Federico Brandsen; y también se le consignó una compañía de artillería volante o ligera de cien plazas a órdenes del capitán José Álvarez de Arenales.
La composición de esta unidad fue multiétnica porque se organizó sobre la base de la Guardia Cívica de Lima, desertores peruanos de los cuerpos realistas, mulatos, mestizos y 600 indígenas. No olvidemos que San Martín creó esta unidad como paradigma del servicio a la patria libre y para fomentar “el aumento de la fuerza física que debe sostener la independencia del Perú” y para que con “su eminente privilegio sirva de modelo a las demás, por su valor en los combates y disciplina en todas circunstancias”.
En octubre de 1822 fue modificada la organización de la Legión: el batallón de Infantería sirvió de base a un Regimiento de dos batallones, llamado “Legión Peruana”; y los dos escuadrones de caballería se convirtieron en un regimiento de esa arma con cuatro escuadrones; el cuarto de estos escuadrones sirvió de base para formar el Regimiento de “Coraceros”, el que a inicios de 1824 adoptó el nombre de “Húsares del Perú”; luego de la batalla de Junín, por su brillante actuación, Libertador Simón Bolívar dispuso que se llamaran “Húsares de Junín”, nombre que aún conserva.
COLOFÓN
“El historial de nuestro Ejército es muy rico y su origen se encuentra en los albores mismos de la guerra de independencia. Estas primeras unidades son testimonio de ello. Por esta razón deben rescatarse del olvido y constituir un orgullo para la institución porque demuestran que la independencia del Perú fue ganada con la sangre de sus hijos”.
“El historial de nuestro Ejército es muy rico y su origen se encuentra en los albores mismos de la guerra de independencia. Estas primeras unidades son testimonio de ello. Por esta razón deben rescatarse del olvido y constituir un orgullo para la institución porque demuestran que la independencia del Perú fue ganada con la sangre de sus hijos”.
Cerramos ésta modesto aporte, repasando una de las
estrofas del Himno de Ica, creado por Raquel Meneses y Sara Lama, que en paz
descasen, y que nos dejaron para la posteridad, y para retomar fuerzas en
momentos difíciles como la pandemia del coronavirus, la siguiente estrofa:
“Ica es, la ciudad…
La que nunca rindió su bandera
Y ser libre por siempre juró…!! ”
Ica, 6 de abril del 2020
Mag. Juan Carlos Romaní Chacón
Biblioteca Municipal “José de San Martín”
Municipalidad Provincial de Ica
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